Qué significa leer en el sXXI?
¿QUÉ SIGNIFICA LEER EN EL SIGLO XXI?
Reflexiona Marc Prensky sobre su pertenencia a una generación que aprendió a entender el mundo a través de la lectura, a diferencia de niños y niñas actuales que aprenden a entender el mundo a través de la tecnología.
La lectura y la escritura junto con la aritmética, constituyen los cimientos de la alfabetización tradicional. Su vigencia es incuestionable, pero en la sociedad actual resultan insuficientes para interpretar el mundo que nos rodea, para comunicarnos o para participar con competencia en discusiones o debates.
En la actualidad las personas interactuamos con otros interlocutores y con los textos, en múltiples modalidades, formatos y soportes, para lo que se requiere la interacción de distintas destrezas.
Desde la oralidad, la escritura y la lectura hasta las formas más sofisticadas de comunicación audiovisual o mediadas por la tecnología, el sujeto del s. XXI participa de un complejo entramado de posibilidades comunicativas, gracias a las cuales desarrolla su capacidad de interacción con otros individuos.
Esta diversidad de modalidades y soportes para la comunicación requiere de una alfabetización más compleja, enmarcada en el concepto de alfabetizaciones múltiples, que permite al individuo su participación en la sociedad del conocimiento como ciudadano activo.
La Unión Europea ha definido la alfabetización múltiple como un “concepto que engloba las competencias de lectura y de escritura para la comprensión, utilización y evaluación crítica de diferentes formas de información, incluidos los textos e imágenes, escritos, impresos o en versión electrónica”.
Recapitulando, para “saber leer” o más correctamente expresado para “estar alfabetizado” en el s. XXI resulta necesario, más allá de interpretar un código de manera comprensiva y crítica, saber usar adecuadamente las tecnologías mediáticas; resulta igualmente necesario poseer competencias de acceso a los contenidos provenientes de distintas fuentes legítimas; debemos también comprender cómo y por qué se producen los contenidos y saber analizar de forma crítica, los lenguajes empleados por los medios y los mensajes que transmiten; por último es necesario ser capaz de identificar y evitar contenidos que puedan ser ofensivos, nocivos o no solicitados.
Por todo ello, una escuela adaptada a los tiempos, debe favorecer que los estudiantes adquieran y desarrollen las competencias necesarias que les ayuden a desenvolverse en un contexto cada vez más digital, modificando, para ello, prácticas educativas relacionadas con la construcción de conocimiento, la organización de espacios y las relaciones entre docentes y alumnos.
Los docentes, en consecuencia, tienen la obligación de conocer los medios a través de los cuales sus alumnos “entienden y aprenden el mundo”, para convertirse en los guías en este proceso que viven los estudiantes al acceder, interpretar y elaborar la información para finalmente transformarla en conocimiento.